Fetiche

Posted by Alan On enero 28, 2010 4 comentarios







Oh là là!!!

Pero claro, ¿quién no tiene un fetiche? Un fetiche común y corriente o un fetichillo por allí escondido. No nos hagamos los interesantes, ni nos hagamos los poco informados o locos o simplemente imbéciles neandertales ¿lleva hache? ¿Nehandertal? o ¿Neanderthal?

¡Allí está! en la repisa descaradamente, en la puerta del refrigerador o escondido tras montañas de inútiles (y queridos) recuerdos. Es bueno para nuestra salud mental tenerlo allí cerca, queridísimo trofeo, llama ardiente de nuestras más ocultas pasiones transformadas-terraformadas en un suceso único y alegórico de nuestras más recónditas y torcidas obsesiones.

Por eso yo tengo mis fetiches bien plantados delante de las narices, los huelo a cada instante, me deleito con el hecho de tenerlos cerca, de ver como se van llenando de polvo de ver como se transforman en otras cosas, que ya no son la cosa-original.

Dormir abrazado a los fetiches perfumados es la cosa más bella del mundo, la situación más trágica, y la más patética al mismo tiempo. Pero no hay exagerar en las bondades y en los defectos de nuestros amadísmos fetiches que están llenos de púas, manchados de sangre, comidos por los ácaros; no son ni tan malos ni tan buenos. A veces me cagan, no hay mejor forma de decirlo mi querido purista: "Me cagan" es la mejor expresión que se puede usar en estos momentos.

Para los científicos, siempre ha sido motivo de estudio el observar como correteamos entre fetiches y nos metemos a casas en llamas sólo por sacar alguno.

////Por suerte no está del todo calcinado...

Mi dulce

Perfumado

Doloroso

Chamuscado


Rosa<<


>>Tuyo


Fetiche



Foto: © 2010 Ariadna R.E.