Frou Frou sinusoidal

Posted by Alan On julio 05, 2011 2 comentarios




Hay cosas que son imposibles de regular, controlar, pronosticar, presagiar, vaticinar.


[Or something]

///No importa qué tan neurótico seas.

Cuando puse esa nota [fatídica] en su libreta supe que la encontraría probablemente en dos semanas; y pensé [ingenuamente] que podría reconocer de inmediato mi caligrafía de abuela. Lo que no conocía de ella era su inclinación paranoica y su absoluta falta de atención con respecto a la caligrafía de los demás [inútil]. Inmediatamente se sintió acosada, profanada, vulnerada por un ser invisible [cobarde] y perverso.

Abandoné la clase de latín y así la dejé por primera vez.
///Dejé a la mina asustada y sola.
///Me sale bien eso de ser stalker sin siquiera proponérmelo.

Hubo dos cosas que siempre me gustaron de ella [chiquita rica]: sus hombros desnudos y el temblor de su cuerpo contra el mío. El resto es quizá circunstancial: su cabello de muñeca Barbie Fairytopia™ con pretensiones rapunzélicas, las discusiones ontológicas, su lengua suave y cariñosa; incluso esos ojos curtidos se ablandaban a veces cuando los enterraba en los míos, cuando absorbían todo el té de almendras con leche.

También un día nos separamos sin gritos y aún no encuentro un motivo para quitar su foto de mi billetera.

///Después tuve… [Perdón, primero las damas]
/// Después, con ella, [Mi reina] sádica, histérica, tripartita. Lívida resucitada del siglo XIX con un pulmón perforado gocé de un brote psicótico.
<<< ¿Quieres quemarte conmigo? [Pensé]
>>> No. [¿Lo pensé o lo dije?]
Compramos un vino rosado de siete pesos en el súper, chileno, ni en Europa es tan barato [me dijo].
— ¿Qué es eso?
— Es un cara de niño.
— Ese insecto me produce sueños terribles. La última vez que vi uno tuve un sueño en el que platicaba conmigo mientras me mordía. Tenía una voz aguda.
— ¿El insecto?
— Sí, EL insecto.
— ¿Apago la luz?
— No, me da miedo la oscuridad.
— ¿Por qué?
— Porque sí, déjala encendida.
— Está bien.
— Tampoco dejes de hablar, hay más luz cuando alguien habla.

Y Las mordidas desaparecieron más o menos en cuatro días, los rasguños en 27 horas, lo demás permaneció intacto. Para bien o para mal hay marcas que sólo la muerte borra.
Principio del formulario


« Ahora soy un mino asustado y solo ».
Ya no me avientan calzones turquesa con encaje.
Ya no me fumo una cajetilla diaria.
Ya no me dicen “papi” los travestis de mi colonia.
Ya no me exigen que las ame, con su mirada de locas y así.

Yo no controlo el futuro, pero dicen que el Risperdal sí.








Foto: © Jazmine Arévalo 2011

2 comentarios:

"La compañera" dijo...

Me encantó

Anónimo dijo...

Hola, extraño tus publicaciones, deberías escribir más seguido,son muy buenas!